Las aves son animales vertebrados y de reproducción ovípara, su principal característica, y que las diferencia de los demás seres vivos, son las plumas.
Las aves existieron desde hace más de 150 millones de años, cuando existieron los dinosaurios, en el Jurásico Superior. Había una criatura llamada Archaeopteryx que vivió en el Tithoniense, hoy Alemania, era del tamaño de un cuervo, tenía cola ósea, dientes y tres uñas o garras en cada ala, lo que le ayudaba a trepar árboles.
Al igual que cada ser vivo, en el planeta, las aves tienen también un nombre científico, que está escrito en latín y que es universal. Pero también tienen nombres comunes dependiendo de la región donde uno habite, por ejemplo al guajolote (nombre científico: Meleagris gallopavo) se le conoce también como pípila, huilo, cócono, totol, pavo.
Las aves habitan en todos los ecosistemas. Pero hay aves que solo son de ciertas regiones, como los colibríes que son nativas del continente americano. El tamaño va desde los 57 mm en el colibrí abeja hasta 2.74 m en el avestruz.
Las hay de diferentes formas, tamaños y colores; con diferentes tipos de picos, patas o alas. Esto se debe al lugar donde viven, a su alimentación (carnívoras, piscívoras, frugívoras, omnívoras, granívoras, nectarívoras), a su edad, si está en etapa de reproducción o cortejo, a la época del año y a su dimorfismo sexual. Y hablando de dimorfismo sexual, en las aves, el macho es más elegante, más llamativo, es el más guapo; mientras que la hembra es de colores pardos y un poco feita; pero eso le sirve para protegerse y seguir preservando la especie; así que cuando llega el depredador al que se comerá será al macho y la hembra sigue vivita.
Ellas también tienen órganos de los sentidos, pero tienen algunos más desarrollados que otros, por ejemplo: en los búhos, tecolotes, lechuzas su sentido más desarrollado es el oído. En las rapaces es la vista, la hay de depredador y de presa. El olfato en otros como en los buitres y zopilotes.